Más de 200 personas acudieron en la tarde de ayer lunes a las 17:00 horas a una manifestación convocada por la Alcaldía de Nerva en la que se exige a otras administraciones que eliminen la problemática de forma definitiva de los desbordamientos fluviales que se padecen en la localidad, tras un nuevo desbordamiento del arroyo Santa María el pasado sábado.
Este, no es el primer desbordamiento que sufre la localidad nervense ya que hace seis años, en el 2019, una inundación mayor provocó muchos daños materiales en hogares y negocios.
Lo que podría considerarse dejadez u omisión de funciones por parte de las administraciones, o insuficiencia en las actuaciones en este ámbito, o tal vez lentitud del sistema a la hora de solucionar los problemas urgentes de la ciudadanía, unidos a situaciones de posibles cambios climáticos, esta provocando una presión social, denunciando la población estas realidades que han hecho reaccionar en parte a los gobiernos con algunas mejoras en materia de gestión de emergencias.
En este sentido, en el día de ayer se publicó en diferentes medios que la Consejería del ramo adjudicó a finales del mes de octubre, por valor de 207.611 euros, el proyecto de desvío y encauzamiento de arroyos tributarios al río Tinto en Nerva, y además, a nivel nacional, vivido el pasado año el trágico suceso en Valencia con la fatídica Dana, según recoge el Diario El Español en el día de hoy, se ha licitado por parte del Gobierno central el desvío del barranco del Poyo, encargándose una nueva redacción del proyecto tras la Dana de hace más de un año que causó 229 muertes. Asimismo se destaca en esta cabecera que estas obras no prevén ejecutarse hasta el año 2031.
Imágenes: Onda Minera.











